Introspectiva nacional y vista al sur.



Introspectiva nacional y vista al sur.

   En tiempos de nacionalismos desmesurados, es indispensable replantear el patriotismo. Al terminar el feudalismo y materializarse el concepto Ciudad-Estado, los  países apostaban por expandir sus vínculos políticos y comerciales  fuera de sus fronteras, acciones que tuvieron un auge a partir de la revolución industrial, el boom de la globalización y en su apartado más extenso con el neoliberalismo. En la actualidad las Ciudades-Estado viven un proceso de conglomeración y reduccionismo detrás de  sus muros, un neofeudalismo[1]; el retroceso al pasado está vigente.

   Ejemplos como la salida de Inglaterra de la Unión Europea, el “Brexit”; la situación francesa con Marine Le Pen y su “proteccionismo Inteligente” que busca evitar el dumping en su apartado positivo, pero que demanda la salida agrupada de Francia  y otros países de la Unión Europea; el caso de la relación tripartita entre Estados Unidos, Canadá, México y su ya anunciada reorganización  en el TLC donde Trump pretende abandonar el acuerdo comercial más importante de los países norteamericanos. En estos casos los países que se aíslan,  buscan regresar a una “independencia”  económica que les permita proteger al sector industrial y laboral dentro de sus muros.

   Ante estos cambios se convierte en prioridad repensar la estrategia político-comercial de México con Estados Unidos y Canadá, la idea de reforzar un muro fronterizo (ya existente) para evitar la inmigración del hombre a otro país, es retroceder. Estamos obligados a voltear la vista hacia nosotros  en tiempos de exilio forzado en nuestra propia tierra.  Es claro que Cultura de Occidente no ha terminado de cuajar en el territorio mexicano, el México Profundo «Guillermo Bonfil» ha estado aislado, en la penumbra, con calma, a punto de regresar, pero frenado por intereses mezquinos al momento de querer abrir la puerta.

   Bajo esta dinámica de introspección, se ponen sobre la mesa los orígenes de las relaciones entre México y Estados Unidos, para ello Octavio Paz, señala las diferencias de ambas naciones “Nuestros países son vecinos y están condenados a vivir el uno al lado del otro; sin embargo, más que por fronteras físicas y políticas, están separados por diferencias sociales, económicas y psíquicas muy profundas. Esas diferencias saltan a la vista y una mirada superficial podría reducirlas a la conocida oposición entre desarrollo y subdesarrollo, riqueza y pobreza, poderío y debilidad, dominación y dependencia. Pero la diferencia de veras básica es invisible; además, quizá infranqueable… La razón es clara: estas diferencias no son únicamente cuantitativas sino que pertenecen al orden de las civilizaciones. Lo que nos separa es aquello que nos une: somos dos versiones distintas de la civilización de Occidente”.

   En lo económico, México cuenta con un endeble andamiaje comercial  para enfrentar su posible salida del TLC, debido a la dependencia económica con Estados Unidos. Además vivimos una crisis política severa, la partidocracia está llegando a su fin y los candidatos independientes no se logran desvicular por completo de los partidos políticos, parece  no existen paliativos que logren regresarle la virtuosidad a la clase política mexicana.

    A pesar de contar con 12 acuerdos comerciales con más de 40 países en el mundo, no hemos fomentado mayores intercambios con las naciones del sur en los Tratados que nos podrían beneficiar, como lo son: La Alianza del Pacifico (Colombia, Chile, Perú), El TLC Único (Costa Rica, El Salvador, Honduras y Nicaragua), El Triángulo del Norte (El Salvador, Guatemala y Honduras). Hemos cargado la balanza a un solo lado, nuestra economía depende directamente de la estabilidad del mercado norteamericano, si a ellos no les va bien a nosotros tampoco, recordemos la recesión económica del 2008.

   Es claro que somos un vecino incómodo para los países del norte, pareciese que nos ven como un garfio que no los deja avanzar, México ha servido como despacho de materia prima y mano de obra en lo económico; como un mercado en lo cultural; y en su visión de paladines democráticos no nos ven como iguales y hacia abajo por nuestra ubicación geográfica, nos ven solo por debajo, ahí radica la gran diferencia. Somos producto de la historia reciente donde dos países industrializados y competitivos se unieron con México, un país en vías de desarrollo.

   México debe de someterse a un ejercicio de introspección profundo. Crecer hacia adentro y mirar hacia el sur. Es momento de someter a juicio los argumentos para integrar a nuestra nación al acuerdo político-comercial ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América - Tratado de Comercio de los Pueblos) con la intención de fomentar el flujo comercial hacia el sur y encontrar un cobijo ante los embates rapaces del naciente nacionalismo desmesurado de Trump. Ejercicio que implica el desarrollo de políticas públicas encaminadas a fortalecer el mercado interno del país; re ordenar la política internacional y las relaciones político-comerciales con las patrias hermanas del sur,  más allá de amurallarse. Buscar abrir puertas, construir puentes y tumbar muros, no ser presas del neofeudalismo; regresar a la América de Bolívar, hoy que el pasado está presente.

[1]El término neofeudalismo “hace referencia a todo grupo separatista que pretende, a través de una nación fraccionaria, conformar un nuevo Estado basado en premisas étnico/culturales <económicas> y que busca en contextos históricos previos a la racionalización por holización de las sociedades políticas del Antiguo Régimen que las convirtieron en las Naciones Políticas modernas (España, Francia, Italia, Alemania, Venezuela, Argentina, Uruguay, Brasil, etc.) su justificación de opresión.”

Referencia electrónica:

Paz, O. (Septiembre de 2012). México y Estados Unidos: Posiciones y contraposiciones”.  PLANETA KAFKA. Obtenido de https://jorgeve.wordpress.com/2012/09/21/octavio-paz-mexico-y-estados-unidos-posiciones-y-contraposiciones/  Consultado el 21 de febrero.

Armesilla Conde, Santiago Javier. La balsa de piedra, nº 6, enero-marzo 2014. Revista de Teoría y geoestratégica iberoamericana y mediterránea. "Definición, categorización y presente político de los movimientos políticos separatistas: el neofeudalismo político". Disponible en: http://eprints.ucm.es/24089/1/La_balsa_de_piedra_n%C2%BA6_-_4.pdf

Profesor Manuel Alejandro Ramírez Nava
Preparatoria 8
Universidad de Guadalajara









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